En los tratamientos de radioterapia, se utilizan diferentes dispositivos de inmovilización que ayudan a mantener la posición del paciente durante el tratamiento. 

Uno de estos dispositivos es la máscara termoplástica, la cual veremos a continuación con más detalle. 

¿Qué son las máscaras termoplásticas? 

Las máscaras termoplásticas son un medio de inmovilización fabricado de material termoplástico, que permite adaptarse a la anatomía del paciente de manera personalizada. 

En su estado inicial, las máscaras tienen una forma plana y rígida. En el momento en que se calientan, pasan a ser flexibles y moldeables para poder adaptarse a la forma del paciente al que se le va a realizar. 

¿Cuándo se utilizan las máscaras en radioterapia? 

Este tipo de inmovilización se utiliza principalmente para tratar lesiones localizadas en la cabeza o el cuello, por lo que su objetivo es inmovilizar esa zona. De esta forma, podemos encontrar máscaras de cabeza o de cabeza y hombros, dependiendo de la zona a tratar y tipo de tratamiento. También existen mascaras adaptadas para la inmovilización de otras partes del cuerpo como tórax o pelvis, aunque su uso es menos común.  

¿Cómo se utilizan las máscaras para radioterapia? 

La máscara se le hace al paciente en el momento previo a la realización del TAC (Tomografía Computarizada), que se utilizará para la planificación del tratamiento. Esta máscara acompañará al paciente durante todos los días de su tratamiento radioterápico.  

Como hemos comentado anteriormente, la máscara inmoviliza al paciente de manera personalizada, por lo que únicamente podrá usarla dicho paciente. De esta forma, se deben evitar cambios importantes en la zona (como cabello, barba o accesorios que se puedan llevar), para asegurar que la máscara encaja a la perfección en todas las sesiones del tratamiento. 

La máscara cuenta con orificios por los que el paciente puede respirar con normalidad, ya que esta cubre la cabeza al completo. En este sentido, los profesionales se encargarán de moldearla para asegurarse de que se adapta correctamente a la cabeza del paciente sin obstruir las vías respiratorias.  

La colocación de una máscara para radioterapia es un proceso sencillo y, generalmente, no resulta incómodo para el paciente. Al tratarse de un termoplástico, cuando la máscara se calienta en agua o en un horno, este adquiere elasticidad. A continuación, se coloca sobre la cara del paciente, que se encuentra tumbado boca arriba, para que adquiera su forma y se fija mediante sistemas de anclaje para asegurar su inmovilización. 

Máscaras termoplásticas en AnatGe 

En AnatGe diseñamos y fabricamos diferentes modelos de máscaras con nuestro termoplástico eXaCast y eXaCast Accuracy de gran calidad. Disponemos de modelos compatibles con cualquier sistema de inmovilización del mercado que además pueden encontrarse en diferentes perforaciones y espesores. 

De igual forma, producimos también máscaras SRS, especialmente diseñadas para tratamientos de radiocirugía, que aseguran una inmovilización optima y segura para el paciente. Algunas de estas máscaras son compatibles con los sistemas de inmovilización para radiocirugía BrainlabTM o Elekta FraxionTM, disponiendo además de versiones adaptadas para Radioterapia Guiada por Superficie (SGRT). 

 

Si necesitas más información sobre las máscaras para radioterapia o cualquier otro dispositivo, no dudes en ponerte en contacto con nosotros.